jueves, 13 de agosto de 2015

NICOLÁS GUILLÉN "Alma música"

NICOLÁS GUILLÉN 
"Alma música"


Yo soy borracho. Me seduce el vino
Luminoso y azul de la Quimera
Que pone una explosión de Primavera
Sobre mi corazón y mi destino.
Tengo el alma hecha ritmo y armonía;
Todo en mi ser es música y es canto,
Desde el réquiem tristísimo de llanto
Hasta el trino triunfal de la alegría.

Y no porque la vida mi alma muerda
Ha de rimar su ritmo mi alma loca:
Aún mas que por la mano que la toca
La cuerda vibra y canta porque es cuerda.
Así, cuando la negra y dura zarpa
De la muerte destroce el pecho mío,
Mi espíritu ha de ser en el vacío
Cual la postrera vibración de un arpa.
Y ya de nuevo en el astral camino
Concretara sus ansias de armonía
En la cascada de una sinfonía,
O en la alegría musical de un trino.

NICOLÁS GUILLÉN "Agua del recuerdo"

NICOLÁS GUILLÉN 
"Agua del recuerdo"


¿Cuándo fue?
No lo sé.
Agua del recuerdo
Voy a navegar.

Pasó una mulata de oro,
Y yo la miré al pasar:
Moño de seda en la nuca,
Bata de cristal,
Niña de espalda reciente,
Tacón de reciente andar.

Caña
(Febril le dije en mí mismo),
Caña
Temblando sobre el abismo,
¿Quién te empujará?
¿Qué cortador con su mocha
Te cortará?
¿Qué ingenio con su trapiche
Te molerá?

El tiempo corrió después,
Corrió el tiempo sin cesar,
Yo para allá, para aquí,
Yo para aquí, para allá,
Para allá, para aquí,
Para aquí, para allá...

Nada sé, nada se sabe,
Ni nada sabré jamás,
Nada han dicho los periódicos,
Nada pude averiguar,
De aquella mulata de oro
Que una vez miré al pasar,
Moño de seda en la nuca,
Bata de cristal,
Niña de espalda reciente,
Tacón de reciente andar.

miércoles, 12 de agosto de 2015

ENRIQUE GONZÁLEZ MARTÍNEZ "Busca en todas las cosas un alma y un sentido"

ENRIQUE GONZÁLEZ MARTÍNEZ "Busca en todas las cosas un alma y un sentido"


Busca en todas las cosas un alma y un sentido
Oculto; no te ciñas a la apariencia vana;
Husmea, sigue el rastro de la verdad arcana,
Escudriñante el ojo y aguzado el oído.

No seas como el necio, que al mirar la virgínea
Imperfección del mármol que la arcilla aprisiona,
Queda sordo a la entraña de la piedra, que entona
En recóndito ritmo la canción de la línea.

Ama todo lo grácil de la vida, la calma
De la flor que se mece, el color, el paisaje.
Ya sabrás poco a poco descifrar su lenguaje...
¡Oh divino coloquio de las cosas y el alma!

Hay en todos los seres una blanda sonrisa,
Un dolor inefable o un misterio sombrío.
¿Sabes tú si son lágrimas las gotas de rocío?
¿Sabes tú qué secreto va contando la brisa?

Atan hebras sutiles a las cosas distantes;
Al acento lejano corresponde otro acento.
¿Sabes tú donde lleva los suspiros el viento?
¿Sabes tú si son almas las estrellas errantes?

No desdeñes al pájaro de argentina garganta
Que se queja en la tarde, que salmodia a la aurora.
Es un alma que canta y es un alma que llora...
¡Y sabrá por qué llora, y sabrá por qué canta!

Busca en todas las cosas el oculto sentido;
Lo hallarás cuando logres comprender su lenguaje;
Cuando sientas el alma colosal del paisaje
Y los ayes lanzados por el árbol herido...

ENRIQUE GONZÁLEZ MARTÍNEZ "A la que va conmigo"

ENRIQUE GONZÁLEZ MARTÍNEZ 
"A la que va conmigo"



Iremos por la vida como dos pajarillos
Que van en pos de rubias espigas, y hablaremos
De sutiles encantos y de goces supremos
Con ingenuas palabras y diálogos sencillos.

Cambiaremos sonrisas con la hermana violeta
Que atisba tras la verde y oscura celosía,
Y aplaudiremos ambos la célica armonía
Del amigo sinsonte que es músico y poeta.

Daremos a las nubes que circundan los flancos
De las altas montañas nuestro saludo atento,
Y veremos cuál corren al impulso del viento
Como un tropel medroso de corderillos blancos.

Oiremos cómo el bosque se puebla de rumores,
De misteriosos cantos y de voces extrañas;
Y veremos cuál tejen las pacientes arañas
Sus telas impalpables con los siete colores.

Iremos por la vida confundidos en ella,
Sin nada que conturbe la silenciosa calma,
Y el alma de las cosas será nuestra propia alma,
Y nuestro propio salmo el salmo de la estrella.

Y un día, cuando el ojo penetrante e inquieto
Sepa mirar muy hondo, y el anhelante oído
Sepa escuchar las voces de los desconocido,
Se abrirá a nuestras almas el profundo secreto.

domingo, 9 de agosto de 2015

ANGEL GONZÁLEZ "Camposanto en Collioure"

ANGEL GONZÁLEZ  
"Camposanto en Collioure"


Aquí paz,
Y después gloria.

Aquí,
A orillas de Francia,
En donde Cataluña no muere todavía
Y prolonga en carteles de "Toros à Ceret"
Y de "Flamenco's Show"
Esa curiosa España de las ganaderías
De reses bravas y de juergas sórdidas,
Reposa un español bajo una losa:
Paz
Y después gloria.

Dramático destino,
Triste suerte
Morir aquí
—Paz
Y después...—
Perdido,
Abandonado
Y liberado a un tiempo
(Ya sin tiempo)
De una patria sombría e inclemente.

Sí; después gloria.

Al final del verano,
Por las proximidades
Pasan trenes nocturnos, subrepticios,
Rebosantes de humana mercancía:
Manos de obra barata, ejército
Vencido por el hambre
—Paz...—,
Otra vez desbandada de españoles
Cruzando la frontera, derrotados
—... Sin gloria.

Se paga con la muerte
O con la vida,
Pero se paga siempre una derrota.

¿Qué precio es el peor?
Me lo pregunto
Y no sé qué pensar
Ante esta tumba,
Ante esta paz
—"Casino
De Canet: Spanish gipsy dancers»,
Rumor de trenes, hojas...—,
Ante la gloria ésta
—... De reseco laurel—
Que yace aquí, abatida
Bajo el ciprés erguido,
Igual que una bandera al pie de un mástil.

Quisiera,
A veces,
Que borrase el tiempo
Los nombres y los hechos de esta historia
Como borrará un día mis palabras
Que la repiten siempre tercas, roncas.

ANGEL GONZÁLEZ “A mano amada”

A mano amada,
Cuando la noche impone su costumbre de insomnio
Y convierte
Cada minuto en el aniversario
De todos los sucesos de una vida;

Allí,
En la esquina más negra del desamparo, donde
El nunca y el ayer trazan su cruz de sombras,
ANGEL GONZÁLEZ 
A mano amada”


Los recuerdos me asaltan.

Unos empuñan tu mirada verde,
Otros
Apoyan en mi espalda
El alma blanca de un lejano sueño,
Y con voz inaudible,
Con implacables labios silenciosos,
¡El olvido o la vida!,
Me reclaman.

Reconozco los rostros.
No hurto el cuerpo.

Cierro los ojos para ver
Y siento
Que me apuñalan fría,
Justamente,
Con ese hierro viejo:
La memoria.